Una vez abierta la Caja de Pandora, quizás vale la pena debatir sobre la reforma electoral que sería necesaria para recuperar la pluralidad democrática del país, que hoy está atascada por el régimen autoritario de polarización. Veo en el proyecto del gobierno cuatro ideas que ya se habían discutido antes y que, en mi opinión, podrían ser recuperables (con ajustes y precisiones): (i) la representación proporcional pura para integrar las cámaras legislativas (pero por distritos); (ii) la desaparición de los órganos electorales locales; (iii) la reducción del número de consejeros electorales; y (iv) la reducción del financiamiento a los partidos políticos. Ninguna es nueva: tienen su historia.
Sobre la reforma electoral – Mauricio Merino
